Hay ciertos momentos y circunstancias en las que simplemente no puedo controlar mis sentimientos-
No puedo desafiar mis miedos y no puedo evitar sentirme debil frente a ellos.
Estoy aqui, practicamente sola, lejos del tesoro mas grande que tengo en la vida, mis padres, mi hermano.
El temor más grande de mi vida es estar aqui, y que el destino se lleve a uno de ellos para siempre y no poder hacer nada, no poder despedirme.
Muchos dicen que desearian estar como lo estoy yo, sin unos padres cerca que me prohiban hacer algo, que controlen mis actos.
Pero ellos no saben lo que es despertar cada mañana, sola, sin nadie que te de la bendición de cada dia, sin una madre presente que pueda velar porque desayunes, comas, o cenes. No saben lo que es llegar a tu casa, o a lo que llamas casa simplemente porque alli duermes, sin un padre y una madre que te pregunte como te fue en el dia.
No tienen idea de lo que es estar sola, sin un padre que te lleve a emergencias si te sientes mal, o si te pasó algo grave. No se imaginan lo que es estar en una sala de emergencias, esperando que alguien cercano pueda ir al menos a buscarte, porque tus padres estan lejos y no pueden llegar a tiempo. No saben lo que es tener que enfrentar los problemas que se presentan sin avisar, sin unos padres cerca que te puedan guiar.
No tienen la remota idea de lo que se siente estar sentada aqui, frente al computador, escribiendo estas palabras, con el rostro bañado en lágrimas, porque es la única manera en la que me puedo desahogar.
Muchos no valoran el vivir todo el tiempo con su familia. No valoran tenerlo todo a la mano justo cuando lo necesitan. No valoran la oportunidad de poder decir papi, mami, los amo, y tenerlos de frente para poder abrazarlos. Muchos desearian poder vivir solos, en una gran ciudad, y poder sentirse libres para gozar. Pero se han preguntado qué pasaria si en uno de esos momentos, algo saliera mal y tu papá no está cerca para poderte ayudar?
Valoro mucho el sacrificio que hacen mis padres, en enviarme a esta gran ciudad, para poder luchar y lograr mis metas, mis sueños. Valoro todo lo que he crecido cuando enfrento cada día por mi cuenta, sabiendo que mis desiciones, mis actos, todo depende de mi; Cuando tengo siempre en mis manos la opción de hacer lo correcto o lo malo.
Cada noche duermo pensando qué estarian haciendo ellos allá y yo aqui, con un vacío dentro de mi, extrañandolos y deseando que estubieran aqui.
Odio cuando a mi mente llegan cosas horribles de lo que allá pudiera estar pasando y yo aqui, lejos y sin poder evitarlo.
Por eso cada día que termina le doy gracias a Dios, porque ha cuidado de ellos, y le pido que por favor, los acompañe siempre y me dé la oportunidad de poder volver pronto y disfrutar con ellos cada momento.
Para muchos les resulta aburrido tener que ir los fines de semana a tu pueblo y pasársela en casa con tu familia. Eso es porque no valoran el hecho de tener sus padres siempre con ellos, cada día.
Si tan solo pasaran lo que estoy pasando yo, si tan solo vivieran un dia de mi vida, solo así sabrían como me siento, solo asi entenderian mis miedos.
Solo les aconsejo que valoren cada minuto que los tienen cerca, porque nada es para siempre y el destino no tiene horas ni fechas.
Domingo 25 de abril del 2010